La Propiedad Intelectual (PI) es uno de los aspectos más críticos en el comercio global actual, especialmente en un mundo cada vez más digitalizado.
En China, el comercio electrónico ha experimentado un crecimiento sin precedentes en la última década, convirtiéndose en el mercado más grande del mundo, con un valor proyectado de más de $2.4 billones de dólares en 2024.
Este auge ha traído consigo desafíos importantes relacionados con la protección de la propiedad intelectual. Desde marcas registradas hasta derechos de autor y patentes, la PI enfrenta amenazas constantes en un entorno digital que evoluciona rápidamente.

El contexto de la Propiedad Intelectual en China
China ha sido históricamente percibida como un país con problemas significativos de piratería, falsificación y robo de propiedad intelectual. A pesar de que el país ha avanzado en la alineación de su marco legal con los estándares internacionales, las infracciones de PI siguen siendo comunes, especialmente en el ámbito digital.
Plataformas como Alibaba (AliExpress), Pinduoduo (Temu) y otras más han sido criticadas por permitir la venta de productos falsificados o que infringen derechos de PI. Aunque estas plataformas han implementado políticas internas y sistemas de reporte de infracciones, el problema persiste debido a la magnitud del mercado y la dificultad de controlar a todos los vendedores.
Incremento en el valor promedio de las transacciones
La protección de la Propiedad Intelectual enfrenta una serie de desafíos complejos y diversos que dificultan la implementación efectiva de medidas para combatir las infracciones, entre los que se encuentran:
- Alta tasa de infracciones de PI en plataformas digitales: Las plataformas chinas albergan a millones de vendedores, lo que hace casi imposible monitorear cada transacción en tiempo real. Además, la velocidad con la que se crean nuevos productos, marcas y tiendas virtuales hace que sea un reto constante detectar y actuar contra las infracciones de Propiedad Intelectual.
- Dificultades en la aplicación de la Ley: Aunque China ha hecho esfuerzos significativos para mejorar la protección de la PI, existen múltiples desafíos en la aplicación de la ley. La ejecución de decisiones judiciales a menudo se enfrenta a obstáculos, como la dificultad para rastrear a los infractores o la imposibilidad de imponer multas significativas debido a la falta de recursos.

- Insuficiente conciencia sobre la PI: Muchos consumidores chinos, especialmente en áreas rurales, carecen de conciencia sobre la importancia de la PI y su impacto en la economía global. Esta falta de conciencia contribuye a una cultura de consumo que a menudo favorece los productos falsificados debido a su menor costo.
- Complejidad del ecosistema: Las leyes de Propiedad Intelectual en China son complejas y, a menudo, están sujetas a interpretaciones diversas. Las empresas extranjeras que operan en el país suelen enfrentar dificultades para navegar este laberinto legal y proteger sus derechos de PI de manera efectiva. Además, el proceso para registrar y hacer cumplir los derechos de PI puede ser largo y costoso.
- Tecnología avanzada para infringir la PI: Con el desarrollo de nuevas tecnologías, los infractores de PI han encontrado métodos cada vez más sofisticados para eludir la detección. Por ejemplo, técnicas como la inteligencia artificial, el deep learning y la manipulación de algoritmos de búsqueda pueden utilizarse para copiar y vender productos que infringen PI sin ser detectados fácilmente por los sistemas de monitoreo automatizados de las plataformas de comercio electrónico.
Esfuerzos gubernamentales para mejorar la protección
Por lo tanto, China ha reconocido la necesidad de fortalecer la protección de la PI para fomentar la innovación y atraer inversión extranjera. En los últimos años, ha implementado varias reformas para abordar las preocupaciones en torno a la PI:
- Reformas legales: En noviembre de 2020, China promulgó una nueva versión de la Ley de Patentes, aumentando las compensaciones económicas por infracción y facilitando la carga de la prueba para los titulares de derechos de PI. También se han introducido cambios en la Ley de Derechos de Autor y la Ley de Marcas Registradas para fortalecer la protección de estas áreas.
- Establecimiento de tribunales especializados en PI: En 2014, China estableció tribunales especializados en PI en Beijing, Shanghái y Guangzhou para mejorar la experiencia y la eficiencia en el manejo de casos relacionados con la PI. Desde entonces, se han establecido más tribunales especializados en otras ciudades importantes.

- Mejora en la cooperación internacional: China ha intensificado su cooperación con otros países para combatir las infracciones de PI. El país ha firmado memorandos de entendimiento con Estados Unidos, la Unión Europea y otros países para mejorar el intercambio de información y la cooperación en la aplicación de la ley.
- Campañas contra la piratería y la falsificación: El gobierno chino ha lanzado campañas periódicas para combatir la piratería y la falsificación en el comercio electrónico. Estas campañas incluyen inspecciones de plataformas en línea, el cierre de tiendas infractoras y la imposición de multas a los infractores.
Algunos casos de plagio en plataformas chinas
Las plataformas de comercio electrónico chinas como Shein, Temu, AliExpress y otras han enfrentado numerosas acusaciones de plagio y violación de derechos de propiedad intelectual en los últimos años.
Como te contó Rastrear Paquete, estas acusaciones provienen de diseñadores independientes, grandes marcas de moda y otras empresas que han denunciado que sus diseños son copiados y vendidos a precios significativamente más bajos en estas plataformas.
Para enfrentar estas acusaciones, algunas plataformas han implementado medidas como programas de eliminación de productos infractores y sistemas de inteligencia artificial para identificar posibles violaciones de propiedad intelectual.

Las plataformas también han sido criticadas por la falta de transparencia en su manejo de los reclamos y por la dificultad que enfrentan los titulares de derechos al intentar hacer valer sus derechos en un entorno digital masivo y descentralizado.
A pesar de estos esfuerzos, la percepción de que estas plataformas toleran o facilitan el plagio y la falsificación sigue afectando su reputación a nivel internacional.